Gracias a los estudiantes de Periodismo de la Universidad Nacional de El Salvador (UES), quienes me pidieron un taller breve sobre Metodología de la Investigación, encontré este viejo trabajo (julio de 2004), el cual me gustó mucho escribir. El trabajo fue realizado precisamente como entrega final de la materia Metodología Cualitativa que cursé en el Área de Postgrados de la Facultad de Humanidades y Educación de la Universidad Central de Venezuela (UCV). Aquí lo reproduzco para una reflexión sobre las relaciones entre la metodología cualitativa y el análisis del discurso. Fue una primera aproximación...
Introducción
Para un estudiante, profesor o investigador universitario, de la rama
del conocimiento que sea, siempre resulta interesante encontrarse con esquemas,
paradigmas o concepciones que iluminan y redefinen intempestivamente su forma
de ver y pensar, su manera de proceder, en fin, su visión global sobre la
academia y su quehacer cotidiano. Cuando creemos que todo lo sabemos (en general)
y que las deficiencias de conocimiento pueden interpretarse simplemente como
fallas de información que serán solventadas con lecturas o experiencias nuevas,
entonces llega el momento crucial en que el destino nos revela ciertas
verdades, ciertas razones, que nos hacen desaprender para aprender de nuevo.
Sin duda alguna, esto es lo que le ha ocurrido a un grupo de
estudiantes de distintas áreas, quienes acudieron (algunos como curso de
ampliación, otros como materia electiva de su postgrado de origen y uno o dos
escapando del tedio y saciando su curiosidad) a la materia Investigación
Cualitativa I, dictada por la profesora Esther Wiesenfeld.