martes, 26 de agosto de 2008

Nuevo trabajo


Me siento bien.

Por primera vez estoy en un trabajo que me complace como nunca ningún otro. No vale, mentira... Ser profesor ha sido una experiencia emocionante y satisfactoria, la cual cada día brinda más ganas de colaborar con la formación intelectual de las y los jóvenes de la Escuela de Comunicación Social de la UCV. Pero en este momento (y por eso creo que vale la pena comentarlo en este "sitio") estoy en "algo" muy cerca a mis inquietudes más íntimas.

Desde hace unas semanas estoy colaborando en la Fundación Librerías del Sur y he conocido el esfuerzo de muchísima gente para hacer llegar el conocimiento en forma de libro a más y más personas.

Descubrí la artículación institucional de la llamada Plataforma del Libro y la Lectura del gobierno nacional y me siento cómodo y emocionado por ser parte de todo esto. En sólo días he visto el ahínco con que se trabaja en instituciones que como profesor de Lengua y Literatura veía "de lejos". Ahora conocer y trabajar con la Casa Nacional de las Letras Andrés Bello, el Centro Nacional del Libro, el Celarg, la Fundación Librerías del Sur y las editoriales El Perro y la Rana, Monte Ávila y la Biblioteca Ayacucho ha sido el inicio de una experiencia fascinante que bien ha merecido el abandono de las reseñas que tengo pendiente de Pedro Juan Gutiérrez y Vila-Matas que prometí en el último post.

Esto no es una excusa. Es una noticia de primera plana de mi periódico personal.

Savará.

domingo, 3 de agosto de 2008

Crítica cómplice según yo


Crítica cómplice. Así tituló Alianza Editorial el libro que recopila todas las críticas y reseñas literarias que escribió por años Mario Benedetti en diversos diarios de América Latina y España. Le llamó así para disculparse de que a fin de cuentas las "críticas" no eran tan críticas y la "reseñas" no buscaban otra cosa sino celebrar la aparición de un título importante o la fruición que sintió al leer algún texto de un amigo o colega admirado.

Así haré lo que pretendo comenzar aquí en el blog. Una crítica cómplice, cercana, sin posturas, sincera y desestresada de lo que esté leyendo en este momento.

No esperaré a terminar un libro, estudiar al autor, revisar la bibliografía sobre él (o ella ... qué machista), hacer fichas, llamar a un amigo, buscar las críticas precedentes y ensayar varios borradores antes de una versión final. Esto es un blog y se supone informal. Por lo tanto, describiré simplemente lo que ocurrió durante o después de la lectura.

Intentaré "mostrar" lo que me "hizo" la lectura del libro. Apelaré únicamente a mi experiencia previa (por eso no revisaré fuentes distintas al sentimiento y a la complicidad). Pura intuición.

¿Por qué hago esto? Porque he leído libros últimamente que me han impactado y enseñado, pero no he escrito sobre ellos precisamente por el estrés de querer hacer algo "especial". ¡Especial, la mierda!, diría Pedro Juan Gutiérrez, uno de los escritores que leo en este momento.

He dejado de "reseñar" (en complicidad) libros excelentes, impactantes y transformadores de Bolaño, Cercas o Vila-Matas, esperando no sé qué...

Es hora de soltar la corbata, sorber un poco de elixir demoníaco y no pararle bolas a nada. Escribir, como dice mi pana Eloi, escribir.

Bueno, iba a empezar ahora, pero como dice nuestro querido Bartebly: "Prefiero no hacerlo". Empiezo mejor mañana... Si me acuerdo.