sábado, 23 de mayo de 2009

Cerveza tibia, Benedetti y Julio David

La música suena, un libro espera, los niños ríen, la cerveza se calienta. Todos son detalles que revelan el paso del tiempo; el tiempo que me toca experimentar en este momento para adentrarme melancólicamente en mis cavilaciones, en mis mentiras, en mis verdades. La cotidianidad se disfraza de "momento mágico" y veo en un tramo de la biblioteca de la sala los lomos de algunos poemarios de Benedetti. Entonces, me percato de que ni siquiera me afectó como me tenía que afectar su muerte. Doy un sorbo a la botella de cerveza tibia y pienso en un solo libro de él: Crítica cómplice. Y pienso que la complicidad es lo único que nos salva de la tediosa vivencia de vivir... Benedetti se fue siendo cómplice de todos nosotros... De todos quienes sabemos que la literatura es importante (esta última frase me la acaba de regalar Julio David, quien está detrás de mí mientras escribo. Uno de mis más fieles cómplices...)...

domingo, 17 de mayo de 2009

La Habana

Se me antoja recordar en este preciso instante la ciudad de La Habana. Mágica urbe que se levanta ante nuestra pequeñez como una situación colosal. En Obispo camino en el recuerdo hasta llegar hasta Ambos Mundos. Me devuelvo y me detengo en el primer restaurant donde escucho un son cubano. Pido una cerveza Bucanero y decido perderme en mis recuerdos. Y, de repente, estoy otra vez aquí en Caracas. Cierro los ojos con fuerza añorando estar de nuevo en La Habana...

Los poetas no mueren...


Seguiremos leyéndote porque estás vivo en tus libros, Mario...

Uno de mis poemas preferidos de Benedetti...

Otherness

Siempre me aconsejaron que escribiera distinto
que no sintiera emoción sino pathos
que mi cristal no fuera transparente
sino prolijamente esmerilado
y sobre todo que si hablaba del mar
no nombrara la sal

Siempre me aconsejaron que fuera otro
y hasta me sugirieron que tenía
notorias cualidades para serlo
por eso mi futuro estaba en la otredad

El único problema ha sido siempre
mi tozudez congénita
neciamente no quería ser otro
por lo tanto continúe siendo el mismo

Otro si digo / me enseñaron
Después que la verdad
Era más bien tediosa
El amor / cursi y combustible
La decencia / bastara y obsoleta

Siempre me instaron a que fuera otro
Pero mi terquedad es infinita

Creo además que si algún día
me propusiera ser asiduamente otro
Se notaría tanto la impostura
que podría morir de falso crup
o falsa alarma u otras falacias

Es posible asimismo que esos buenos propósitos
sean sólo larvadas formas de desamor
ya que exigir a otro que sea otro
en verdad es negarle su otredad más genuina
como es la ilusión de sentirse uno mismo

Siempre me aconsejaron que escribiera distinto
pero he decidido desalentar / humilde
y cautelosamente a mis mentores

En consecuencia seguiré escribiendo
igual a mi o sea
de un modo obvio irónico terrestre
rutinario tristón desangelado
(por otros adjetivos se ruega consultar
criticas de los últimos treinta años)
y eso tal vez ocurra por que no sé ser otro
que ese otro que soy para los otros.